Víctor Vizcarra asegura que se enamoró del béisbol tan pronto como se metió en el deporte. A sus 11 años, tiene claro que su sueño es llegar a las Grandes Ligas y jugar para los Dodgers de Los Ángeles. Sin embargo, su padre, que lo apoya en sus anhelos, no titubea al decir que si su hijo descuida sus estudios, el deporte se tendría que acabar.